jueves, julio 17

Decoraciones y cosas peores

08/08/05

Cuando un hombre vive solo, se enfrenta a una desición que a veces se resuelve por default, aunque a veces interviene o la mamá, oo la novia o una hermana, o cualquier combinación de las anteriores, dicha desición es la de la decoración de su nueva casa.
Sabiendo que restos de comida, cigarros y cascos vacíos de cerveza, no hacen un buen centro de mesa para las visitas. Y que, como ya en días anteriores comentaba, el desorden en el cuarto, es un grave factor anti-seducción para las mujeres. Uno termina teniendo que pensar en un buen cuadro, un adorno en la cocina, jueguitos de baño y ciertas cosas más que personalmente no suenan muy varoniles, pero que de no tenerlas acaba la casa pareciendo cueva, y por lo tanto poco acogedora, más aún, yo puedo tener mi cuarto totalmente de cabeza, no me apura en lo más mínimo, pero el baño? la cocina? Definitivamente NO y así se impone una cota mínima de pulcritud y presentación que a veces no resulta ser tan mínima.

Y nos sucede entonces que compramos un florero, trapos de cocina, aromatizantes y cosas así. Y aunque nuestro espíritu se rebele y cuelgues un cuadro de una moto (chava, cómic, etc.) ya nunca más es lo mismo, pues desde que un hombre de las cavernas eligio poner la piel de la presa en la entrada en lugar de usarla para calentarse, los hombres entramos en la vanidad de la decoración de la casa, ¿y ustedes que se han comprado?


Macho menos

09/08/05

Algunos entes masculinos, tienen por costumbre reunirse a ver el futbol, algunos otros gustan de echarse un dominó, una cascarita, oo simplemente sentarse a tomar (algunos incluso a cantar).
Independientemente de que algunas de estas costumbres suenen totalmente funestas, hay ciertos elementos de reunión tribal en ellos, que aunque las mujeres tengan su contraparte siempre serán diferentes.

Las reuniones de puros hombres tienen detalles muy pintorescos como el del borracho dolido, al que los demás le ofrecen su solidaridad, o la del compadre todolopuede (todolosabe es equivalente), las del cuate influyente y mil variantes que a lo largo de la reunión (y más si se conocen bastante) van aflorando. Desafortunadamente desde que desapareció el WBS carezco de estas reuniones pero en casa del buen Doc antes de que se fuera me toco una buena jejeje, que tal ustedes platíquenos en sus diferentes lugares con quienes se sacuden la testosterona como buenos gallos en corral?

1 comentario:

  1. Qué tal Ricardo, tanto siempo sin leernos, escucharnos o vernos. Bueno, pues yo también tengo ese tipo de reuniones con mis compañeros de la colonia. Sí, esas reuniones sin duda tienen mucho de tribales: licor, plática sobre temas muchas veces un tanto ríspidos, libertad "masculina" (sin mujeres todos nos transformamos), los borrachos que se van transformando... Yo sé que nuestras reuniones (pedas) son muy prototípicas, y eso es lo que seguramente hermana a muchas personas que luego ni se conocen (por lo menos por ese día o noche). Saludos de nuevo Ricardo, me estaré paseando por tu blog y a ver si te paseas por el mío.

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